Otros ateos como Christopher Hitchens han hecho esta pregunta pero de manera distinta para los evolucionistas teístas diciendo que si el universo y la vida tienen billones de años de edad entonces ¿por qué Dios esperó tanto para crear a las personas en un mundo que muestra que solo venimos naturalmente?

En primer lugar no hay una espera para Dios porque Él está fuera del tiempo (2 Pedro 3:8). Segundo, el mundo no muestra que venimos naturalmente aquí y asi lo demuestran los argumentos del cosmológico del Kalam, la información biológica del ADN y el ajuste fino las cuales indican que hubo inteligencia en el origen de la vida y el universo.

Por último, los creacionistas no creemos que a Dios le tomó tanto tiempo para crear el universo. Así que, respondiendo ahora a la otra pregunta de ¿por qué Dios creó la tierra en siete días si con su omnipotencia pudo crearla en tan solo un segundo? En primer lugar, la duración total de la creación de Dios no fue completada en 7 días sino en 6 días. En el séptimo, Dios descansa, no porque estaba cansado sino en el sentido de que cesó toda actividad creadora (Isaías 40:28 y Salmo 121:3-4).

Además, el que haya creado el universo en 6 días no significa que no sea omnipotente o que no pudo crearlo en menos tiempo (falacia non sequitur). Entonces, ¿por qué en 6 días y no menos? La misma Biblia da la respuesta: “Seis días trabajarás, y harás toda tu obra, mas el séptimo día es reposo para Jehová tu Dios…Porque en seis días hizo Jehová los cielos y la tierra, el mar, y todas las cosas que en ellos hay, y reposó en el séptimo día; por tanto, Jehová bendijo el día de reposo y lo santificó.” (Éxodo 20:8-11).

En otras palabras, Dios creó todo en 6 días literales como ejemplo o ilustración de que debemos trabajar para obtener nuestros alimentos pero que también debemos tener al menos un día libre para adorar a Dios y evitar la explotación laboral o el abuso por parte del empleador hacia el empleado ya que cuando trabajamos todos los días de la semana sin descansar nos matamos físicamente a nosotros mismos.