Si Dios conoce nuestro futuro entonces ¿realmente no tenemos libre albedrío?

            Si un Dios omnisciente ya sabía lo que íbamos a hacer de antemano entonces ¿el libre albedrío no sirve de nada porque no podría ser posible? ¿Es solo una mentira reconfortante? A esto se le conoce como "La Paradoja de la Omnisciencia" y las premisas que plantean los ateos para sostener este argumento de que un Dios omnisciente y el libre albedrío humano son incompatibles son las siguientes:
-Necesariamente, antes de la creación del universo Dios sabe de antemano que voy a hacer X, entonces haré X.
-Dios sabe, de antemano, infaliblemente que haré X.
- Por lo tanto, necesariamente, haré X y el universo es determinista y no hay libre albedrio para los agentes dentro de él
           De hecho, esto hasta se debate entre creyentes, aquellos que creen ambos pueden coexistir se conoce como “molinismo” y aquellos que creen que se oponen diciendo que todo está predestinado son considerados como calvinistas o “deterministas”. Algunos calvinistas dicen que su sistema teológico no solo es bíblico sino que los padres de la iglesia lo creyeron pero no el libre albedrio lo cual fue enseñado primeramente por Jacobo Arminio. Sin embargo, esto es falso pues Ireneo de Lyon ya estaba refutando la vieja interpretación que usan los calvinistas sobre la predestinación la cual vino primeramente del gnosticismo y maniqueísmo en su comentario de Romanos 9 (Contra los Herejes, Libro 4, Capítulo 39). De hecho, es al revés. Ningún cristiano en los primeros 4 siglos creía en las enseñanzas o reinterpretaciones calvinistas sobre la gracia las cuales tampoco se encuentran en la Biblia ni en los escritos patrísticos de los Padres de la Iglesia antenicenos sino que surgieron durante el siglo 4 y 5 siglo por el filósofo católico Agustín de Hipona (354-430) quien al principio creía en el libre albedrió pero luego lo rechazó debido a un altercado con Pelagio y porque estuvo influenciado por el gnosticismo y el maniqueísmo.

           ¿Y qué hay de los ateos? ¿Quién tiene la razón? Veamos, el que Dios sepa nuestro futuro no significa que no tengamos libre albedrío, ni implica que ya todo está determinado (falacia non sequitur).  Seguimos haciendo libremente lo que hacemos y creemos en el mundo. Dios sabe el principio y el fin. Por eso sus profecías se cumplen y todo lo sabe. Pero el que Dios sepa que vas a escoger el mal o ser ateo o creyente no significa que Él está causándote hacer eso. Eso tu decides hacerlo libremente. Cuando Dios te creó a ti sabía que ibas a ser ateo o creyente pero usted escogió libremente ser ateo (si es que eres ateo) así como yo escogí libremente ser creyente.
             Por tanto, el que Dios sepa lo que va pasar no significa que no tenemos libre albedrío. Dios tampoco está obligado a no crear gente inconversa. Si hiciera eso entonces ¿dónde estaría el libre albedrío? Como tampoco no hubiese podido mostrar su misericordia y amor por nosotros como lo hizo a través de Jesucristo para salvarnos del castigo del pecado. En otras palabras, la omnisciencia no determina el futuro; el futuro determina a la omnisciencia. Así que, el molinismo es capaz de unir la soberanía Divina y la libertad humana porque un acto libre puede ser perfectamente conocido como precisamente eso, como “acto libre”, y, por tanto, el que se lo conozca no le quita en nada su cualidad de tal. Pongámoslo con un ejemplo sencillo: imaginemos que vemos en la calle a alguien que libremente está pateando a otra persona, ¿el hecho de que lo estemos viendo quita en algo que su acto sea libre? No. Conocemos su acto como acto libre, y punto. El hecho de que nosotros veamos (conozcamos) el acto de esa persona no implica que nuestro conocimiento lo haya determinado a hacer eso sino que la determinación de su acto viene de su voluntad.
           Pero aquí alguno podrá objetar: “Oh, bueno, pero con el caso de Dios es diferente porque él conoce todas las cosas desde antes que sucedan”. Aquí la clave del problema está en la palabra “desde antes”. Sucede que con tal tipo de cláusula se está diciendo como que el conocimiento de Dios es algo que se desarrolla en el tiempo conforme a un esquema de pasado-presente-futuro respecto de distintas cosas. Pero no es así pues Dios y su conocimiento, que se identifica con su ser, no está ni existe en el tiempo sino de modo trascendente al tiempo. A diferencia de lo que sucede con nuestros procesos cognitivos, Dios “ve las cosas simultánea y no sucesivamente” (2). Así que Dios no conoce en un “antes” en el sentido temporal sino que desde su conocimiento eterno abarca en un solo acto todos los sucesos temporales.     
           Pongamos un ejemplo adicional para ilustrar bien este último aspecto. Imaginemos que, por alguna razón, se me concede el don de la Omnisciencia y, por tanto, tengo simultáneamente el conocimiento de todo lo pasado, presente y futuro. Dentro de eso conozco, por ejemplo, que para el año 2080 un joven X elegirá libremente casarse con una muchacha Y. Ahora, sucede que estoy conociendo tal acto como acto libre. El joven podría haber elegido casarse con cualquier otra muchacha, pero en la realidad se ha dado que, de entre todas las opciones potenciales, él eligió libremente casarse con la muchacha Y. De este modo, la omnisciencia simplemente implica esto: que yo, al conocer todo lo real (en este ejemplo hipotético), conozco que el joven realizará esa elección libre por el simple hecho de que tal elección libre es un evento de la realidad. Punto, tan sencillo como eso. Análogamente, pues, Dios conoce absolutamente todos los actos, pensamientos y deseos que libremente surgen en el hombre (así como si tal o cual será “rico” o “pobre”) sin que ello elimine la libertad. Conocer no es lo mismo que determinar. Luego, no hay propiamente contradicción entre Omnisciencia y libre albedrío.
          Por cierto, los ateos que mencionan este argumento ya refutado lo tienen al revés, no es el Dios bíblico y el libre albedrío los que son incompatibles sino el ateísmo y el libre albedrío pues si el materialismo es cierto entonces sólo somos máquinas de carne sin libre albedrío que no razona sino que solo reacciona químicamente y que tampoco piensa libremente sino que su forma de “pensar” es controlada y ya predeterminada por las leyes de la naturaleza. De hecho, ni siquiera tienen conciencia ya que según el materialismo la consciencia es solo una ilusión en un mundo naturalista. Esto es algo que hasta científicos ateos como Hawkings, Daniel Dennett, Sam Harris, Francis Crick, David Berlinski, William Provine y otros reconocen.       
            
               En fin, de un conjunto de mundos posibles que podrían suceder (conocimiento natural de Dios), hay un subconjunto de mundo factibles que lograrían Su voluntad (conocimiento medio de Dios). Dios escoge libremente uno de estos mundos factibles, y Él perfectamente conoce lo que sucederá en este mundo actual (conocimiento libre de Dios). En el modelo molinista, Dios soberanamente controla todas las cosas, sin embargo, los humanos poseen libertad real por el cual deberán rendir cuentas.

Sam Harris, filósofo ateo que dice que las personas son responsables por sus acciones pero cree que no tenemos libre albedrío. El chiste se cuenta solo.